Hoy, mientras agradecemos a Dios el don de Madre Magdalena Morano, modelo de educadora para cada FMA, celebramos con alegría y gratitud dos grandes acontecimientos: la conclusión de la experiencia capitular vivida no solo por nuestras Hermanas capitulares sino por todas las Hermanas que hemos acompañado el proceso durante estos meses y el inicio de una nueva etapa en la historia del Instituto, que iluminado por el Documento Capitular y a la luz de Emaús reemprende el camino.

“Un proceso similar de renovación se realiza en cada Comunidad Educativa cuando se pone a la escucha de la realidad, cuando está abierta al diálogo, cuando está disponible a releer sus vivencias a la luz del encuentro verdadero con Jesús, que impulsa a ir hacia los otros con entusiasmo, con alegría, conscientes de que somos discípulas misioneras” señala el Documento capitular.

El llamado del Papa Francisco y el Documento Capitular orientarán la vida de cada Inspectoría en el nuevo sexenio. Solo nos queda agradecer por tanta gracia y disponer los corazones para acoger las deliberaciones del Capítulo. Esperamos con cariño a Sor Gloria y a Sor Elsy que pronto estarán con nosotras y nos transmitirán en directo cuanto han vivido en Roma. ¡Bienvenidas!

Gracias al gran equipo que se ha movilizado para tenernos al tanto a través de la web y a tantísimas Hermanas que entre telones han sostenido esta experiencia. A la Madre y al nuevo Consejo General nuestros augurios y bendiciones.